Las fuerzas israelíes se han retirado de la zona del campo de refugiados de Nuseirat en el centro de Gaza después de varios días de mortíferas operaciones militares, según la Dirección de Defensa Civil en el enclave asediado.
Los vídeos geolocalizados muestran una gran destrucción en la zona, con varios bloques de apartamentos destruidos o gravemente dañados.
La Dirección afirmó que sus equipos habían podido recuperar varios cadáveres de debajo de los escombros, pero que para retirar otros se necesitaría equipo de excavación pesado.
El portavoz de Defensa Civil, Mahmoud Basal, dijo a CNN que la situación era “trágica”.
“La destrucción es a gran escala, incluidos edificios residenciales e infraestructuras”.
Basal estimó que unas 500 personas habían muerto, herido, detenido o desaparecido en la operación militar. CNN no puede verificar la estimación y se ha puesto en contacto con el ejército israelí sobre el alcance y el propósito de sus operaciones en Nuseirat.
El alcalde de Nuseirat, Iyad Maghari, dijo que una semana de ataques israelíes en la zona había “privado a los residentes de los servicios humanos más básicos, como agua, saneamiento y recogida de residuos”.
Maghari dijo que unos 25.000 metros cuadrados de carreteras, pozos de agua y generadores que bombeaban agua habían sido destruidos.
Dijo que alrededor de 20.000 toneladas de desechos se acumularon en las calles y alrededor de los albergues debido a la falta de combustible y la destrucción de los vehículos municipales, lo que generó un problema de alimañas.
El sistema de alcantarillado resultó gravemente dañado, dijo, con más de 3 kilómetros (1,8 millas) de tuberías destruidas.
“El municipio de Nuseirat sufre una importante escasez de diésel, necesario para operar pozos de agua… además de operar plantas de tratamiento de aguas residuales”, dijo Maghari.
