Por más de un mes, la ciudadanía ha estado expectante para conocer de primera mano por parte del alcalde Víctor Roqueme Quiñonez, el estado en el que fue dejada la Alcaldía Municipal por parte de la administración de Robinsón Manosalva.
Es de recordar algunas de las situaciones que ha generado mayor interés entre los aguachiquenses durante el gobierno local anterior, como lo fueron los múltiples escándalos que enmarcaron al instituto Municipal de tránsito y transporte, como la chatarrización de vehículos, fotomultas, semaforización, mantenimiento de la malla vial y cada uno de los cambios consecutivos en la dirección de esta dependencia.
Así mismo, en materia de educación, el estado del PAE y el transporte escolar en las zonas rurales. El estado y aporte al Hospital Local de Aguachica, la contratación y pagos a quienes prestan el servicio de vigilancia y seguridad en la Alcaldía.
Por otro lado, también se espera conocer sobre el estado económico en el que se encuentra el Municipio y con ello si la chequera se encuentra en rojo. Será importante evaluar y conocer la finalidad de la adjudicación de contratos realizados a último momento para los corregimientos de Barranca Lebrija y Loma de Corredor, los cuales suman un presupuesto cercano a los 1.630 millones de pesos.
Se confía entonces, que en las próximas horas sea de total conocimiento público el estado en el que está la Alcaldía de Aguachica, y que así, esto sea línea guía para que el mandatario Roqueme Quiñonez pueda establecer una hoja de ruta para lo que serán sus cuatro años de gobierno.
