En una triste noticia para el mundo de los medios de comunicación en Colombia, el pionero de la radio y la televisión, Julio Sánchez Vanegas, ha fallecido a la edad de 93 años. La noticia fue confirmada por su hijo, Julio Sánchez Cristo, quien anunció el deceso del empresario.
Hace unos días, se había informado sobre la delicada salud de Sánchez Vanegas en una clínica de Bogotá, aunque no se proporcionaron detalles sobre la enfermedad que enfrentaba.
Nacido el 19 de julio de 1930 en Guaduas (Cundinamarca), Sánchez Vanegas llegó a Bogotá a la edad de 10 años y dejó una marca imborrable en el mundo de la radio desde temprana edad con su inconfundible voz, acompañando los boletines del reporter Esso en la emisora Nueva Granada.
El año 1954 marcó un hito en su vida cuando la televisión llegó a Colombia. El entonces mandatario, el general Gustavo Rojas Pinilla, solicitó a Sánchez Vanegas que fuera el maestro de ceremonias para dar la bienvenida a esta nueva tecnología en el país. Este momento no solo significó el inicio de su exitosa carrera en televisión, sino también el encuentro con su futura esposa, Lili Cristo, gracias al propio mandatario.
Su contribución a la industria de los medios fue fundamental, convirtiéndose en un pionero tanto en la formación de presentadores en Colombia como en la gestión empresarial de los medios de comunicación. Además de su trabajo en radio y televisión, incursionó en el cine mexicano y fundó su propia productora, Producciones JES.
Programas como “Concéntrese” y “Espectaculares JES” marcaron su reputación como presentador, abriendo nuevos horizontes en concursos y programas musicales. Su productora se destacó al obtener los derechos para transmitir la gala de los premios Oscar y mantener durante 42 años los derechos de transmisión de Miss Universo.
Julio Sánchez Vanegas también desempeñó un papel crucial al dar oportunidades a sus hijos en los medios. Su legado perdura a pesar de que la productora entró en liquidación a comienzos del siglo XXI debido a cambios en los procesos de licitación de espacios televisivos.
Con su partida, Colombia pierde a un visionario que dejó una huella indeleble en la historia de la televisión y los medios de comunicación en el país.
