En el comentario económico del día publicado por ANIF (Asociación Nacional de Instituciones Financieras) recuerdan que el 22 de septiembre se darán a conocer los datos oficiales sobre la pobreza en el año 2022, entre tanto, hacen una revisión a las estimaciones realizadas en el pasado mes de mayo. Estas proyecciones ofrecen una visión general de la pobreza monetaria en el país y brindan un panorama inicial sobre lo que se puede esperar en términos de reducción de la pobreza.
Es fundamental tener en cuenta que el año pasado la economía tuvo un buen desempeño, con un crecimiento del 7.7% anual, lo que a su vez generó empleo y redujo la tasa de desempleo al 11.2% en promedio durante todo el año, en comparación con el 13.8% en 2021. Estos factores son favorables para los ingresos familiares y, en consecuencia, para la disminución de la pobreza.
Sin embargo, existen elementos que podrían contrarrestar la caída esperada de la pobreza. En primer lugar, la mayor parte del empleo generado fue asalariado y no por cuenta propia, lo que podría beneficiar más a personas de hogares no pobres. Además, el impacto inflacionario afecta de manera desproporcionada a los hogares vulnerables, lo que dificulta superar la línea de pobreza. Asimismo, las transferencias monetarias a las familias disminuyeron en comparación con 2021, y estos recursos son fundamentales para complementar los ingresos de los hogares. Por lo tanto, su reducción puede aumentar el indicador de pobreza. Por último, los cambios introducidos por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) en la encuesta integrada de hogares (GEIH) pueden generar cierto ruido adicional que debe ser considerado.
Una perspectiva aproximada: ANIF
Con base en este contexto, ANIF ha desarrollado un modelo de microsimulación que permite obtener estimaciones aproximadas del porcentaje de pobreza y pobreza extrema, considerando factores como los cambios en el empleo, los salarios y las variaciones en los precios. Estas cifras ofrecen una idea de hacia dónde podrían dirigirse estos indicadores.
Según las estimaciones, el porcentaje de personas bajo la línea de pobreza en 2022 podría situarse en un 37.52%, con un intervalo de confianza entre el 36.6% y el 38.4%. Esta cifra representa una disminución estadísticamente significativa, ya que el valor observado en 2021 (39.3%) se encuentra fuera de este intervalo. Además, se estima que aproximadamente 18.9 millones de colombianos se encontrarán en situación de pobreza, lo que significa una reducción de 691 mil personas en comparación con el año anterior.
En cuanto a la pobreza extrema, las estimaciones indican que podría rondar el 11.5% en 2022, con un intervalo entre el 12.3% y el 10.8%. Esto implica que alrededor de 5.8 millones de personas (290 mil menos que en 2021) vivirían con menos de $161 mil al mes.
Es importante destacar que las estimaciones de ANIF son un marco de referencia para el análisis y que solo la publicación de los datos oficiales por parte de DANE, prevista para mañana, resolverá las dudas y nos brindará un panorama más completo y preciso de la pobreza en el país en 2022.
Aunque las estimaciones sugieren una reducción de la pobreza, es crucial abordar los desafíos persistentes que podrían obstaculizar este progreso. Se necesita un enfoque integral que promueva la creación de empleo sostenible, proteja a los hogares vulnerables de la inflación y fortalezca las transferencias monetarias para asegurar que todos los ciudadanos tengan acceso a oportunidades y una vida digna.
