En medio de una preocupante ola de altas temperaturas, se ha registrado un aumento alarmante en la quema de basura en diferentes áreas urbanas y rurales. Esta práctica irresponsable, además de ser perjudicial para la salud, está contribuyendo significativamente al empeoramiento del cambio climático y agravando las condiciones de calor extremo.
Las autoridades locales han advertido sobre las graves consecuencias ambientales y sanitarias derivadas de la quema indiscriminada de desechos. Los materiales plásticos y otros elementos tóxicos presentes en la basura liberan sustancias nocivas al ser quemados, afectando la calidad del aire y poniendo en riesgo la salud de las personas, especialmente de aquellos con afecciones respiratorias.
Ante esta situación, se hace un llamado urgente a la conciencia ambiental y al compromiso de la ciudadanía para evitar la quema de basura. Es esencial promover prácticas responsables de reciclaje y disposición adecuada de los desechos, así como fomentar el uso de alternativas más sostenibles. Solo con la colaboración de todos podremos enfrentar el desafío del cambio climático y proteger el medio ambiente para las generaciones futuras.
