(CNN) — Turistas de todo el mundo han quedado varados en la antigua ciudad de Machu Picchu después de que Perú se sumiera en un estado de emergencia tras el arresto del presidente del país.
El principal medio de acceso al sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO, la línea férrea, se suspendió cuando estallaron violentas protestas y los partidarios del presidente bloquearon las carreteras, lo que dificultó viajar dentro del país o salir de él.
PeruRail dijo que ayudaría a los pasajeros afectados a cambiar las fechas de su viaje.
“Lamentamos las molestias que estos anuncios generan a nuestros pasajeros, sin embargo, se deben a situaciones ajenas a nuestra empresa y buscan priorizar la seguridad de los pasajeros y trabajadores”, indicó la empresa en un comunicado.
LATAM Airlines Perú dijo que las operaciones desde y hacia el Aeropuerto Internacional Alfredo Rodríguez Ballón en Arequipa y el Aeropuerto Internacional Alejandro Velasco Astete en Cuzco, a 75 kilómetros (46 millas) de Machu Picchu, habían sido suspendidas temporalmente.
“LATAM mantiene un monitoreo constante de la situación política en Perú para brindar la información pertinente de acuerdo a cómo pueda impactar nuestra operación aérea”, dijo la aerolínea en un comunicado. “Quedamos a la espera de la respuesta de las autoridades correspondientes, quienes deben tomar medidas correctivas para garantizar la seguridad para el desarrollo de las operaciones aéreas”.
Agregó: “Lamentamos los inconvenientes que esta situación fuera de nuestro control ha causado a nuestros pasajeros y reforzamos nuestro compromiso con la seguridad aérea y la conectividad en el país”.
El Departamento de Estado de los EE. UU. ha emitido un aviso de viaje para los ciudadanos que viajan en Perú, que ha incluido como un destino de «reconsideración de viaje» de nivel tres.
«Las manifestaciones pueden provocar el cierre de carreteras locales, trenes y carreteras principales, a menudo sin previo aviso o plazos estimados de reapertura. Los cierres de carreteras pueden reducir significativamente el acceso al transporte público y los aeropuertos y pueden interrumpir los viajes tanto dentro como entre ciudades», advierte.
Arriba: Turistas haciendo fila en la estación de trenes de Machu Picchu. Imagen vía Getty.