Investigadores desestiman hipótesis de que el crimen de la pareja de pastores y sus dos hijos fue una equivocación y están a punto de desestimar que un caso de extorsión.
Un equipo de especialistas del CTI de la Fiscalía que viajó desde Bogotá hacia Aguachica, Cesar, empiezan a descartar las primeras hipótesis sobre la masacre de la familia Lora Rincón.
Los investigadores han desestimado que se haya tratado de una equivocación; confirmaron que la masacre fue planeada y que los sicarios tenían plenamente identificadas a sus víctimas, a quienes siguieron durante varias horas.
La hipótesis que se maneja que fue una masacre por extorsión, en este momento en las autoridades comienza a perder fuerza, puesto que el CTI no tiene indicios de que la familia fuera víctima de este delito.