En los últimos meses se ha observado un aumento en el número de ambulancias en la ciudad, principalmente debido a las mejoras realizadas en algunos centros de salud y la apertura de nuevas clínicas. Esto ha sido una buena noticia para aquellos involucrados en accidentes de tránsito, ya que casi tienen la posibilidad de elegir a qué centro médico ser trasladados.
Sin embargo, la situación no es la misma para aquellos ciudadanos que se encuentran en situaciones de emergencia por otras causas. Un incidente ocurrido en la carrera 36 con calle 12 norte, ha dejado en evidencia esta problemática, pues un joven en condición de calle quien habría sido empujado por uno de sus compañeros, quedó tirado en el suelo con varias lesiones.
A pesar de los sollozos y lamentos del hombre, cuando los habitantes del sector y los testigos del incidente llamaron a la patrulla del cuadrante, los policías no tomaron ninguna acción. Posteriormente, una ambulancia fue contactada por la comunidad, pero sorprendentemente, los paramédicos se negaban a auxiliar al joven, a pesar de su evidente inmovilidad debido al fuerte golpe recibido.
La comunidad alarmada por la situación, exigió a los miembros del servicio médico que atendieran al joven y lo trasladaran a un centro asistencial para recibir la atención necesaria. Este incidente pone de manifiesto la difícil realidad que enfrentan aquellos ciudadanos que no cuentan con un seguro médico.
En el país, la atención médica ya es complicada para aquellos que tienen un seguro, ya sea en el régimen subsidiado o contributivo. Sin embargo, para aquellos que no cumplen con los requisitos para acceder a un seguro médico, se encuentran desamparados y a merced de la suerte cuando atraviesan situaciones de enfermedad o emergencia.
Aunque sabemos que los servicios médicos pueden ser costosos, este es un llamado a la atención digna que deben recibir todos los ciudadanos, que especialmente debe ser tocado desde el punto de vista de la humanidad y solidaridad.
