Organizaciones sociales cuestionan ‘batidas’ del Ejército en la región
El año pasado, dos jóvenes que aseguraron ser desplazados por la violencia de uno de los municipios que conforman la provincia de Ocaña y el sur del Cesar, recibieron la orden de soldados del Batallón Santander de subirse a un camión para llevárselos hasta el cuartel a definir su situación militar.
Días después de la ‘batida’ los desplazados, que eran mayores de edad, resultaron en la Base Militar de Tolemaida, en el Tolima, donde iniciarían su servicio militar.
Esto llamó la atención de las organizaciones sociales de Norte de Santander, que por acciones de tutela y derechos de petición lograron que ambos retornaran a la región de Ocaña y el sur del Cesar.
Por hechos como el comentado se ha conformado la plataforma por el derecho a la objeción de conciencia al servicio militar obligatorio y la militarización de la región de Norte de Santander y sur del Cesar, que ha reportado otros siete casos en la región.
Rafael Jaimes un abogado explicó que existe una sentencia de la Corte Constitucional, la C-879 de 2011, que dice que el Ejército no podrá obligar o forzar a un joven para llevarlo a un Distrito, ya que configura un secuestro simple o detención arbitraria e ilegal.
“La sentencia dice que a las personas que no tengan definida su situación militar, que se conocen como remisos, se les debe dar una boleta de citación para que asistan en una fecha definida. Pero también resalta que para los mayores de 18 años a los que se demuestre que no trabajan ni estudian, se les debe hacer una citación por primera vez”, detalló Rafael Jaimes.
En ese aspecto, la labor de los militares debe limitarse incluir en una planilla a las personas y a entregarles una boleta, proceso que no puede durar más de cinco minutos, precisó el vocero de la plataforma de objeción de conciencia.
“Tampoco se pueden montar a los jóvenes en el camión ni llevarlos a cantones o Distritos militares.
Cuestionan ‘batidas’ del Ejército en la región