Pese a las múltiples vicisitudes que afrontan los colombianos por el invierno, la ciudad muestra otra cara por las noches cuando se encienden las luces navideñas.
Además a pesar de la poca circulación de los pesos, surge una esperanza de cambio para esperar un mejor amanecer en especial en aquellos que lo han perdido todo a raíz de la fuerte ola invernal que afecta a todos los colombianos.